Como Pastores de la Iglesia Católica, iluminados por la fe en Jesucristo, «nuestra paz» (Ef 2,4), conscientes de que siempre debemos anhelar y construir un mundo de paz porque «el Señor ha vencido al mundo y a su conflictividad permanente “haciendo la paz mediante de su cruz (Col 1,20)”» (EvangeliiGaudium, 229;), reiteramos nuestra voluntad de servir como mediadores y testigos en el Diálogo Nacional propuesto por el gobierno.