La compañera Rosario Murillo, vicepresidente de Nicaragua, dio gracias infinitas a Dios porque tuvimos una excelente noche de 24 de diciembre, una Navidad Santa llena de alegría para los niños, para las niñas, las familias, las comunidades, llenas de celebración de nuestras tradiciones religiosas y sobre todo llenas de confianza en Dios que nos derrama paz y bien, paz y bien sobre Nicaragua, sobre nuestra Nicaragua sagrada.

Destacó que este miércoles por la noche se veía las celebraciones en todas partes, todavía las familias el 25 de diciembre celebrando la alegría de la paz, agradeciendo a Dios por la paz, por el trabajo, por la bendición de tener valores de familia, de comunidad y de reunirnos en estos días.