En cada promesante hay una historia llena de fe y es que muchos son creyentes de Santo Domingo por haber recibido milagros de sanación, protección o simplemente por mantener vivas las tradiciones del pueblo.
A tempranas horas de este Primero de agosto la diminuta y milagrosa imágen salió acompañada de miles de promesantes y tradicionalistas que al ritmo de filarmónicos le bailan a su santo patrono.