Santo Domingo de Guzmán vuelve a su trono en Las Sierritas entre fe, fervor y tradición

En medio del estallido de la pólvora y el sonar de los filarmónicos, ingresó a su santuario en Las Sierritas la imagen de Santo Domingo de Guzmán, quien permaneció durante 10 días en la capital.

"Mi niño al nacer no podía respirar, lo intubaron y logró sobrevivir, hoy mi hijo tiene 10 años y aquí andamos juntos pagando el milagro. Desde ayer nos quedamos a dormir en la iglesia de Managua y hoy salimos muy temprano con el santo, Minguito es milagroso y por eso estamos aquí felices, dándole gracias por sus milagros", manifestó Pedro Cuadra. 

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Miles de promesantes y tradicionalistas despidieron a su santo patrono con muestras de fe y pago de milagros concedidos, unos llegaron hasta la iglesia de rodillas, otros bailaron vestidos de folclore con sus réplicas en mano.

"Le bailo a Minguito en pago a un milagro que me hizo con mi nieto, él nació con labio leporino y en la cirugía todo salió bien y ya tengo 14 años viniendo a bailarle por ser un santo milagroso y bueno", expresó Manuel Flores.

Muchos llegaron a pagar promesas acompañados de familiares y amigos, de manera que esta es una celebración llena de fervor.

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"Traigo a mi nietecita para inculcarle la tradición y el amor a Santo Domingo, estamos en la obligación de inculcar a nuestra descendencia el respeto y la fe a nuestro patrono", manifestó María Luisa Bello.