Los ciberdelincuentes y los terroristas están realizando cada vez más ataques destructivos contra las redes del gobierno de Estados Unidos, y muchas agencias federales aún no se dan cuenta de que son un objetivo fácil, según un ejecutivo de la firma de ciberseguridad FireEye Inc.

FireEye ha seguido una "tendencia alcista" de piratas informáticos que tratan de penetrar los sistemas militares y civiles de Estados Unidos para destruir datos, según Tony Cole, vicepresidente de FireEye y director de tecnología de Global Government. La compañía con sede en Milpitas, California, cuenta con varias agencias estadounidenses como sus clientes, incluyendo el Departamento de Estado.

"La mayor preocupación hoy en día son los ataques más destructivos", dijo Cole en una entrevista al margen de una conferencia cibernética en Washington. Mientras los países a menudo apuntan a otros gobiernos en el espionaje cibernético, "estamos empezando a ver más terroristas tratando de obtener más capacidades cibernéticas en este espacio también", agregó.

Incluso después del ataque a la Oficina de Gestión de Personal de 2015, que comprometió los datos de 21.5 millones de personas y se ha vinculado a hackers chinos, "nadie ha aprendido las lecciones de eso todavía", dijo Cole. "Muchas de las organizaciones civiles hoy en día no han despertado".

Cole dijo que ha entregado información sobre una orden ejecutiva de ciberseguridad esperada desde hace mucho tiempo a funcionarios superiores del gobierno de Trump, a quienes declinó identificar. Dijo que espera que la Casa Blanca busque la opinión de los comités del Congreso que han trabajado durante mucho tiempo con el sector privado en temas cibernéticos.

Mientras que aún no se cubren varios puestos cibernéticos claves en el gobierno, Cole dijo que se siente optimista por el nombramiento de Rob Joyce, quien dirigió el grupo de hackers de la Agencia de Seguridad Nacional, para trabajar en asuntos cibernéticos en el Consejo de Seguridad Nacional. Joyce tiene "experiencia operacional" y "puede tener un impacto significativo en todo el gobierno federal en ese papel".

Algunos organismos están mejorando su ciberseguridad, pero "incluso las organizaciones que lo están haciendo mejor que otras todavía no lo hacen de forma grandiosa", dijo Cole. "Algunos son bastante decentes, algunos son bastante buenos, pero todavía hay una enorme cantidad de esfuerzo que tiene que ocurrir".

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