La derecha fascista en Venezuela provocó actos de violencia, desoyendo los reiterados llamados a la paz por parte del presidente de ese país, Nicolás Maduro. La jornada de caos inducida con fines politiqueros dejó como saldo tres muertos y al menos 30 heridos. Se desconoce si estos resultados son considerados exitosos por los promotores de los disturbios.