En la funeraria Sierras de Paz se rindió homenaje póstumo a la maestra, bailarina, coreógrafa y pionera del folclor nicaragüense Irene del Socorro López Pérez, quien ha pasado a otro plano de vida, dejando su gran legado cultural a las nuevas generaciones, declarándola Hija Dilecta de la ciudad de Managua y otorgando la Orden General José Dolores Estrada "Batalla San Jacinto" en Grado de Gran Cruz.
Autoridades municipales, Asamblea Nacional, amigos y folcloristas acompañaron en el homenaje a su esposo Francisco Martínez Mejía e hijas Lisseth de los Ángeles e Irene Francisca Martínez López.
La declaratoria como Hija Dilecta por la Alcaldía de Managua fue leída por la compañera Jennifer Porras, Secretaria del Concejo Municipal y se hizo en reconocimiento solemne de su vida dedicada a la danza y al folclor nacional, por haber rescatado, creado y enseñado con amor las formas tradicionales del pueblo.
Además, por fundar y dirigir agrupaciones emblemáticas que han honrado a Managua en todo escenario, así como por su labor pedagógica e investigativa que deja guía y métodos a las presentes y venideras generaciones y por hacer del arte un servicio a la identidad y a la unidad de Nicaragua.
"Que esta distinción sea una muestra de agradecimiento de nuestra ciudad a la maestra de maestras, cuyo paso firme seguirá guiando nuestros pasos al son de la marimba y al canto de nuestras raíces", dijo Porras.
La alcaldesa Reyna Rueda destacó que el legado que Irene ha dejado a las nuevas generaciones es de un valor incalculable.
“Luchó por el reconocimiento, por fortalecer en esos momentos tan difíciles de nuestra cultura, nuestras raíces, nuestro folclor, nuestra identidad a través del folclor. Tenemos mucho que agradecerle y no la despedimos con tristeza, sino con muchos aplausos, mucha alegría y mucho agradecimiento, y aquí estamos en nombre de nuestro Copresidente Comandante Daniel y nuestra Copresidenta Compañera Rosario”, aseveró Rueda.
De igual manera, la diputada Gloria Dixon, Primera Secretaria de la Asamblea Nacional, dio lectura al diploma de la Orden General José Dolores Estrada "Batalla de San Jacinto" en Grado Gran Cruz.
El documento dice lo siguiente: "La Asamblea Nacional de Nicaragua, en uso de sus facultades, otorga póstumamente a Irene del Socorro López Pérez la Orden General José Dolores Estrada 'Batalla de San Jacinto' en Grado Gran Cruz a la compañera, maestra de generaciones, folclorista, mujer notable, que con su extraordinaria labor dedicó su vida y obra al rescate y el enriquecimiento de la cultura nicaragüense, realizando presentaciones tanto en el país como en el extranjero, dejando en alto a la nación con un ejemplo de amor a la patria, legado que perdurará como fuente de inspiración para la presente y futuras generaciones".
La Orden fue entregada al esposo e hijas de la insigne maestra por el Doctor Gustavo Porras, Presidente de la Asamblea Nacional, quien expresó que es una entrega de corazón y de cariño.
"Irene no solo fue una enorme luchadora por la cultura, sino que también fue una enorme luchadora por las transformaciones, por la Revolución, y vos sabés que la mejor trinchera para no dejarnos dominar es la cultura, el fortalecimiento de la cultura", señaló el doctor Porras.
"La Orden te la entrego en nombre de la Asamblea, pero también en nombre del Comandante Daniel y la Compañera Rosario", añadió.
En el homenaje también estuvo presente el Arquitecto Luis Morales Alonso, quien destacó que, más que una despedida, es agradecerle por todo lo que aportó al rescate de la cultura nicaragüense, sobre todo en las danzas folclóricas nacionales, nuestras costumbres e identidad.
“Hoy no estamos solo comprometiéndonos con Irene, con su legado, como investigadora, como folclorista, como mujer, maestra, bailarina, coreógrafa, sino agradeciéndole todo lo que dio a nuestra Nicaragua y, desde nuestro Gobierno, el Copresidente Daniel la reconoció con la Máxima Orden, la Orden de la Independencia Cultural Rubén Darío, por sus trabajos invaluables, incansables para la patria que hoy se llena de orgullo de decir, aquí nació Irene López, la reina del folclor de Nicaragua”, resaltó.
Asimismo, el maestro Ramón Rodríguez, director del Teatro Nacional Rubén Darío, mencionó que se despide a una gran maestra del folclor e investigadora de las raíces culturales.
“Hoy la despedimos con gratitud, con esa sensación de estar orgullosos de su trabajo, porque realmente fue una labor de muchos años. Y justamente como Teatro Nacional e Instituto de Culturas de Pueblos y Juventudes le damos un homenaje con nuestros bailarines”, refirió.
Irene López fue fundadora de la primera Escuela Nacional de Danza Folclórica, así como coreógrafa, bailarina, educadora, escritora, promotora cultural y figura fundamental de la preservación y proyección del folclor nicaragüense.
Entre los hitos de su trayectoria se pueden mencionar las presentaciones entre 1969 y 1987 en países como México, Costa Rica, El Salvador, Honduras, Guatemala, Panamá, Rusia, Cuba, Venezuela, Hungría, entre otros, llevando a estos espacios muestras de la cultura.
Integró por muchos años la Asociación Sandinista de Trabajadores de la Cultura y la Unión de Artistas de la Danza, destacándose en la promoción de los derechos de los trabajadores del arte en Nicaragua, y dirigió la Escuela Nacional de Danza entre 1980 y 1987.