Lo peor de todo esto, es que el Centro Cultural de la antigua estación del Ferrocarril, fue una obra construida con el apoyo de la Cooperación de España. Una inversión económica cultural producto del convenio entre el Instituto Nicaragüense de Cultura (INC) y la Alcaldía Municipal de la Paz Centro, con el financiamiento de la cooperación Española. Se han quemado por las llamas miles de euros invertidos en pro del rescate del edificio que ocupó la estación del ferrocarril en sus dorados tiempos.
¿Qué mensaje manda el PLI a la cooperación Española y del mundo? Parece que el mensaje es para que no sigan cooperando con nuestra cultura y el rescate de los valores culturales del pueblo de Nicaragua. Tanta necesidad tenemos de recursos económicos para la cultura, que este acto vandálico y criminal solo puede considerarse como un delito al patrimonio cultural y como tal debería ser objeto de acusación criminal de parte del Estado de Nicaragua.
El edificio incendiado constituía parte del patrimonio cultural de Nicaragua, por declaratoria expresa, de tal forma que el Código Penal podría aplicarse a los autores de este vandálico incendio.
Expreso mi solidaridad con el pueblo de La Paz Centro que ha sufrido esta pérdida irreparable de su patrimonio cultural arquitectónico y cultural. ¡Los autores del delito, deben ser castigados!













