Muy buenas tardes, Compañera; buenas tardes de hoy,último día de este Año 2022, que ha sido tan fructífero, lleno de frutos, porque hemos sabido sembrar, cultivar y cosechar a cada paso.
Buenos Días, Buenas Tardes, Buenos Tiempos los que vivimos, Gracias a Dios, en nuestra Nicaragua. Y Queridas Familias hoy estamos caminando, cerrando Año y abriendo otro, que, pedimos a Dios, con Tod@s y por el Bien de Tod@s, y Tod@s Junt@s.
Queridos hijos, nietos y nietas, bisnietos y bisnietas de Blanca Segovia... ¡Blanquita! Todavía escucho su voz, todavía hace 4 días, cuando recién ingresaba al hospital, escuchamos su voz.
Un silencio que és Misterio y Gloria. Un silencio que no és silencio, que és Música del Cielo. Hay que saber siempre encontrar y descifrar los mensajes del silencio.
Adelante, Compañera...! Estamos y Vamos Adelante, yTod@s Junt@s, que és lo importante. Esa Promoción Permanente de la Unión, esa Promoción Permanente del Amor, del Cariño, de la Familia, de los Valores de Familia, de Vecindario, de Comunidad.
50 Aniversario de aquella terrible hecatombe y donde la Naturaleza destruyó nuestra Capital, Managua. Miles de Hermanos nicaragüenses, Adultos, Mayores, Jóvenes, Niños, Niñas, perecieron en ese terrible terremoto.
Buenas tardes... Son momentos intensos, momentos de recuerdos imborrables. Alguien decía que en cada uno de nosotros quedó un agujero en el Alma. Perdimos las referencias, las direcciones; perdimos Seres Humanos, és lo primero; perdimos construcciones