El Ministerio de Salud (Minsa) a través del Centro de Adicciones Valentín Méndez, ubicado en Managua, realizó una jornada de actividades físicas y recreativas con jóvenes que enfrentan una lucha constante en contra del consumo de alcohol, drogas o enfrentan situaciones de estrés y depresión.
A un año de haber sido inaugurado dicho centro, se ha venido trabajando con adolescentes, jóvenes y adultos que han decidido cambiar su estilo de vida y reintegrarse a la sociedad.
“Estas actividades son realizadas con el objetivo de disminuir en nuestros pacientes los cuadros ansiosos y de estrés que ellos presentan, realizamos actividades grupales para fortalecer las relaciones interpersonales y siempre estamos a disposición de nuestros pacientes, atendemos de lunes a viernes de 8 de la mañana a las 4 de la tarde”, destacó Ana Carrión, enfermera.
Ingresar al centro es totalmente gratuito, únicamente se requiere de una buena actitud, deseos de superarse y dejar atrás el oscuro mundo de las adicciones.
“Yo soy un adicto en recuperación y le doy gracias a Dios que me dio la guía para llegar a este lugar, el que ha sido construido por un gobierno que vela por nosotros. Es la primera vez que un gobierno se preocupa por nosotros los adictos, los que estamos en la calle, los que delinquimos a causa de una adicción. Aquí tenemos apoyo moral, emocional y poco a poco vamos superando nuestras adicciones para ser mejores ciudadanos”, destacó Víctor Orozco.
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“Mi experiencia en este lugar ha sido muy bonita y eso me motiva a invitar a los jóvenes que aún están en las drogas a que vengan, aquí nos tratan con cariño, practicamos deporte, recibimos atención psicológica y eso me ha permitido salir adelante de la mano con los ángeles que sirven al pueblo en este centro. Hace poco decidí dejar las drogas y para mí, este será un año de victorias y bendiciones para mi vida”, José Miguel Mayorga.
El único requisito para poder ingresar al centro es presentar cédula de identidad y en el caso de los adolescentes, mostrar su acta de nacimiento. Los pacientes reciben terapia durante 1 año a través de 2 sesiones por semana.