El diputado Adolfo Pastrán realizó una mención especial en la que recordó a los Héroes de la masacre del 22 de enero de 1967, cuando se marcó un punto de inflexión en la lucha contra la dictadura somocista en el que cienes de manifestantes pacíficos fueron asesinados por los esbirros de Somoza.
“Este hecho marcó un antes y un después en la historia del país, convirtiéndose en un símbolo de la brutalidad y la represión de la dictadura de los Somoza, este hecho aceleró precisamente el proceso de lucha, de liberación que culminaría con la caída de la dictadura en 1979. Demostró que los politiqueros de la época usaban y manipulaban a la población para sus intereses personales y de grupo, porque dos semanas después de la masacre, Anastasio Somoza se declaró presidente con el visto bueno de los conservadores, cuatro años después, volverían a darle la espalda al pueblo al acordar con Somoza un triunvirato para repartirse el poder”, señaló Pastrán.
El diputado sandinista mencionó que dicho acto de terror y muerte despertó en el pueblo nicaragüense el sentimiento de unidad y de lucha en contra de la dictadura, fortaleciendo a su vez la determinación de luchar por una transformación social.
“La masacre del 22 de enero se convirtió en un hito fundamental en la memoria colectiva de Nicaragua, recordando a las víctimas y sirviendo como inspiración para las futuras generaciones, se demostró que era necesario terminar con el oprobio y una dictadura cruel y fue el Frente Sandinista de Liberación Nacional quien lideraría la lucha contra la dictadura que culminó con su derrocamiento el 19 de julio de 1979, dando paso a una nueva etapa en la historia de Nicaragua, sentando las bases para la construcción de un modelo democrático y participativo que ha dado oportunidades reales a las familias nicaragüenses para desarrollarse y vivir en paz”, destacó.
“Hoy el Pueblo es Presidente y avanza hacia un futuro mejor y un desarrollo socioeconómico sin precedente en la historia del país. La lucha contra la dictadura somocista y la masacre del 22 de enero de 1967 dejaron un legado profundo para las generaciones actuales, la lucha revolucionaria despertó una conciencia política en la población nicaragüense para defender el país de agresiones extranjeras y títeres que representaron intereses extranjeros como fue la dictadura somocista con el imperialismo norteamericano y hoy, al recordar a los Héroes del 22 de enero nos corresponde defender nuestra identidad nacional, la soberanía y dignidad de Nicaragua y el modelo Cristiano, Socialista y Solidario, que representa la paz, el progreso y oportunidades de desarrollo y erradicación de la pobreza”, finalizó.