PEQUEÑO PAÍS de la América Central, con 148.000 kilómetros cuadrados y seis millones de habitantes, Nicaragua fue sometida a lo largo de tres siglos, de 1523 a 1821, por el imperio español.
Las coyunturas actuales que se desarrollan en diferentes partes del mundo revelan una agresiva política internacional imperial y neocolonial contra Pueblos que luchan por defender su independencia, soberanía y autodeterminación.
Netanyahu-Biden tienen asiento en primera fila ante la Corte Penal Internacional. Los criminales de la primera fila han mantenido como asistentes mamporreros a los regímenes de Inglaterra, Francia, Alemania, Italia y España.
Siempre escuchamos de nicaragüenses que decidieron emprender el viaje hacia Estados Unidos en busca del llamado “sueño americano”. Entre esas historias hay varias que terminaron dolorosamente con la muerte de compatriotas que se ahogaron.
Hoy estamos aquí demostrando nuestro apoyo, con nuestras almas y corazones apoyamos a nuestros hermanos nuestro pueblo palestino, quienes han sufrido lo peor de la humanidad. Nicaragua es como nuestra segunda patria y siempre confiamos en ustedes.
Solo con el conocimiento de la realidad histórica entenderemos. Comienzo esta nota ofreciéndole la lectura de un artículo anterior que puede ser útil como punto de partida y reflexión sobre la agresión del sionazismo a Palestina, léanla.