En la zona alta del municipio de La Concepción del departamento de Masaya, está ubicada la comunidad de Temoá, caracterizada por sus tierras fértiles y clima fresco, condiciones óptimas para diversos cultivos, como el de la pitahaya, también conocida como la "fruta del dragón".
Las laderas de Temoá muestran un paisaje verde y cautivador en donde las plantaciones de pitahaya sobresalen, principalmente de mayo a octubre, cuando se da el ciclo de producción de esta fruta.
En estas tierras, el productor Denis Doña López desde hace 6 años se dedica al cultivo de pitahaya orgánica, es decir, que obtiene una producción libre de agentes químicos, lo que le permite una mejor aceptación en el mercado, sobre todo en el extranjero.
Entre las variedades que cultiva Denis están la Orejona, Rosa, Morada y Lisa e incursiona con la colombiana de piel amarilla con pulpa roja y blanca.
“La Orejona es una variedad que aguanta sol y agua y es una de las variedades muy cotizadas para exportar”, afirmó Doña.
El productor expresó que están iniciando ya con el corte de frutas, con la expectativa de tener mejores precios y ventas este año.
“Esta cosechita se mira que está bastante regular. Nos ha ayudado bastante el invierno y esperamos que continúe así, porque realmente son de 5 a 6 cosechitas (cortes) en el año y estamos esperando que Diosito nos ayude a mantener el tiempo para poder cosechar”, manifestó.
La pitahaya cortada es llevada a Centros de Acopios, donde los productores abastecen a compradores del mercado nacional y extranjero, siendo los destinos internacionales Estados Unidos y países de la región centroamericana.
Respaldo del Buen Gobierno
Doña López agradeció al Buen Gobierno por el apoyo que se le brinda a través del IPSA (Instituto de Protección y Sanidad Agropecuaria) con asesorías desde el manejo de las plantaciones hasta que es exportada la fruta con el cumplimiento de los requerimientos sanitarios.
“Tenemos el beneficio de apoyo con el trampeo, que es con fines de exportación de la fruta. Ellos supervisan y nos dan asistencia con las trampas que sirven para eliminar todo tipo de insectos y erradicar malezas y plagas”, manifestó.
La vida productiva de una planta alcanza una edad hasta los 15 y 20 años, llegando a producir entre 15 y 20 unidades las más jóvenes y hasta 30 las más viejas.
Denis con su cultivo de pitahaya también se ha convertido en un generador de empleos, llegando a tener hasta 25 colaboradores para sacar adelante la producción.
Datos del Ministerio Agropecuario (MAG) indican que en 2025 a nivel nacional se ha reportado el cultivo de pitahaya en 810 manzanas con el 90% en nivel productivo, en las principales zonas productivas de Masaya, Carazo y Managua. En 2024 la producción de esta fruta fue de más de 2 millones de kilogramos.
La pitahaya producida en estas tierras es de excelente calidad y con muchos beneficios para la salud. El productor Denis Doña señaló que hay muchas oportunidades en este cultivo y mantiene la expectativa de que los precios vayan mejorando.